06 febrero 2007

Verano*

Odio el verano, lo odio, odio los pirpintos, odio a los piel tostada, odio a los cara brillante, odio el ruido de los ventiladores, odio los aires acondicionados, odio los resfríos de verano, odio las pelotas playeras y la arena, odio las bebidas aguadas por el hielo, odio las bombuchas, odio a los niños, odio el pavimento, odio el cloro, odio los colectivos, y las vacaciones, odio a los amigos, odio los pupos con arito y a las pieles despellejadas, odio a los mosquitos, odio a los alacranes, odio el cólera y odio la insolación, odio las siestas, odio cuando anochece, odio las estrellas y odio los televisores rotos, odio los best seller. Odio a los discman, los i pods y las radios, odio las polleras cortas y los shores, odio los músculos y los escotes, odio las chancletas y las bikinis, odio las crónicas de vacaciones, odio al que está feliz, odio al que no hizo nada, y también odio las tormentas eléctricas, odio a los grillos y a los sapos, y odio a las langostas, odio los amores en verano y las fiestas en la pileta. Odio todo eso y mucho más, pero si solo levantaras el teléfono y me hablaras quizás podría considerar bajar algunas cosas de la lista.


*Nota: Este y los que siguen son una recopilación de textos/vivencias/ocurrencias, que no responden a una temporalidad demasiado concreta ni ordenada.

3 comentarios:

Hernan dijo...

que lindo

ya te voy a llamar

Guillermo Katz dijo...

aaa, los niños.. como odio los niños.

me dijiste que la habías pasado bien en tus vacaciones, pero supongo que odiando magistralmente igual se puede disfrutar, y además quien dice que no existe el placer por odiar?

lombriza dijo...

De hecho este escrito es de las vacaciones pasadas... de todos modos estuve en un lugar (la playa)donde es muy sencillo odiar.